ALGUNOS VERSOS PASADOS

MI VOZ

Mi voz se pierde
en esquinas de frío.
Mi voz va y viene.

Mi voz camina entre la gente
y se cuela entre su solapa
y el pecho.
Bucea entre los adoquines,
escala por el granito,
se cuelga de cables y antenas.
Mi voz son unos zapatos viejos
sin suelas.

Mi voz, que está en la distancia
que media
entre yo y yo,
busca puertas en azoteas
y tragaluces en las chabolas.

Mi voz puede ser el paso
entre el abismo y el infierno,
es un salto al cielo,
una nube perdida,
un golpe certero
en tus pupilas.

Mi voz, en verano, toma la Luna
y es de sangre.
Baila con las olas,
canta en la tormenta,
llora en días de fiesta,
calla cuando quiere una respuesta.

Mi voz se empapa entre tus piernas,
salta de cama en cama,
se cuela en sueños ajenos,
se arrastra por encimeras y sábanas.
Mi voz es erotismo y esperma.

Mi voz navega entre los indolentes
y a todos los palos juega,
empuja piedras inermes.
Mi voz habla en todas las lenguas.

Mi voz es ronca en el palacio
y juega en la miseria.
Busca oídos que no escuchen,
que se duelan, que no busquen,
oídos ciegos,
endurecidos,
de piedra.
Mi voz es un junco débil movido por
la niebla.

Es un arma que se rompe,
pero que dispara.
Es un recuerdo nostalgiado,
pero que persiste.
Es una canción de ayer,
pero que sabe a eterna.
Es lo que no se quiere oír,
pero que os grita.
Mi voz es una sombra en el desierto,
un imposible,
no es nada.

Mi voz es lo que quisieras escuchar
al tumbarte en tu cama.


NO ME HABLES DE TU NOVIO

Si ves que te hablo de la belleza,
si te abro los ojos a la cara B del mundo
y a la fantasía,
si te descubro paisajes nuevos en las calles
de cada día,
si mis palabras te dan alientos de libertad y esponjan
tus sentimientos
no me hables de tu novio.

Si sabes que tras mis filosofías se esconde
un beso perdido,
si sabes que mi llamada repentina busca la
intimidad de tus pupilas,
si esperas que tras mis gestos y mis noches
venga mi cuerpo,
si descubres que mis horas buscan
desafiar a tus sábanas
no me hables de tu novio.

No me hables de tu novio.
No vengas con que si dice tal o piensa cual.
No defiendas, a duras penas, sus miras obtusas y
su cultura de números y del Marca.
Porque yo no lo necesito
y además, ambos, sabemos que él es un poquito canelo.