de carne y verso

-Pequeño rincón para la poesía. Esto no es "ciber-exhibicionismo", es un ejercicio de creación.-

Nombre:
Lugar: Ferraz, Madrid, Cocos (Keeling) Islands

lunes, noviembre 30, 2009

ACCIDENTE DE BUCEO (v.1)


Los hielos derretidos
tintinean al compás del piano
en el Café Central.
El jazz abruma.
Añejas mesas de mármol
en un huracán de notas
y ritmos.

Pausa.

El pianista, cabeza del cuarteto,
presenta el nuevo tema y se lo dedica a
Esbjörn Svensson,
compositor de jazz muerto en un accidente de buceo.
Media sonrisa de asombro
ante la revelación de una muerte ridícula.
Exótica.
La primera vez que buceé en mi vida,
mi mujer me enseñó un pecho.
Arrancan las primeras notas
directamente del corazón
a través del dedo que,
casualidades, tautologías,
lleva el mismo nombre.
Fue por una apuesta tonta. Un pique.
Mis compañeros,
estremecidos,
intentan llevar el ritmo
con las manos,
con la boca,
Un pecho.
con la cabeza.
Dos músicos y un poeta
extasiados
ante el Arte.
Tal vez algo bebidos.
...y no había más corales.
Ahora entran el batería y
el contrabajo.
Es muy joven. Canario.
Un pecho. Qué anécdota tan
absurda...
Los camareros hablan en la barra
demasiado alto.
Mi mirada de desaprobación
no es valiente.
Pido otro patxarán.
Y otro vino.
Y otro tercio.
Mejor aceitunas de esas aliñadas
que tenéis que
panchitos.
Bueno, y panchitos.
Maroto quiere panchitos.
Lo recuerdo rosado, firme.
Tu risa.
El saxo sorprende nuestras
miradas
perdidas.
Humo y penumbra.
Luces que no (te) alumbran.
El mismo pecho que pinté
con mis dedos.
Observo a Barajas,
que mira, de pronto, su móvil
Cómo vivirá esto. Cómo entenderá esto.
Escribe un mensaje.
Saco mi libreta.
El pecho que se me escapa, que no está,
Tomo notas
para un poema
non est.
mientras la melodía no cesa.
Yo creo que él escribe a su
novia.
La responde.
La música sube y retiembla.
Nos retiembla.
El pecho que dejé en una playa de Honduras.
El público, en otra esfera,
siente que ha visto
el fuego
por primera vez,
que lo descubre.
El pecho que dejé en el olvido,
Ultimos compases.
flotando,
Vuelta al principio. Da capo.
liberado de sus ataduras, ligero y traslúcido,
Un humano no puede hacer eso.
al vaivén de las olas, en el mar de mi memoria.
Final.
El público, en pié, aplaude.


1 Comments:

Blogger Pepe Larraz said...

Truhan, este es buenisimo.
¡Pero buenisimo!

7/12/09, 0:13  

Publicar un comentario

<< Home